jueves, 25 de octubre de 2012
Stravinsky y a Joyce
El amor de Debussy por el color musical, que rompe con toda una tradición de la música europea y que explica las variadas afirmaciones, de que sus notas son colores y no signos musicales, tiene también una especie de comprobación en los títulos de muchas de sus obras. Por ejemplo, su retrato pintado por Jacques-Emile Blanche, el célebre artista francés, quien también pintara a Proust, a Stravinsky y a Joyce. A él dedicó Debussy sus 'Tres estampas para piano', que son todo un símbolo de poesía y equivalencias en imágenes, con sus pagodas, que se le ocurrieron al compositor al escuchar un gamelán balinés en la Exposición Internacional de París en 1889. Su 'Atardecer en Granada', que para don Manuel de Falla era una de las piezas más perfectas y breves en sus síntesis de la música española y, los 'Jardines bajo la lluvia', título que bien podía ser de Monet, donde el genial compositor evoca 2 viejas canciones infantiles. 'Las Estampas' fueron dedicadas a Jacques-Emile Blanche, cuya poderosa cabeza de Debussy, mitad fauno, mitad antiguo profeta, es quizá la imagen más repleta de sugestión y de hondura psicológica que nos ha quedado del músico francés.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario